Pau Antó comenzó en el mundo de las inversiones, haciendo pruebas, cometiendo errores y ganando experiencia hasta que a los 27 años alcanzó la libertad financiera.
A partir de entonces elaboró una metodología con la que mentoriza a inversores para potenciar sus operaciones y ayudarles a lograr sus metas. De este modo incrementan sus ingresos pasivos y consiguen lo que todos anhelamos: ser los dueños de nuestro tiempo.